Hace unos días descubrí, a raíz de moverme tras investigar levemente sobre ciertas quejas que recibí por aquella entrada sobre los «orgonites», una nueva página web. Recibe el peculiar nombre de «essències» (twitter), que viene a significar «esencias» en catalán. Y esta entrada va dedicada especialmente a esa persona que me pidió que vulnerara mi libertad de expresión.
El caso es que esta página web, entre muchas otras cosas, tiene una sección de consultas, la cual no pude evitar echar un vistazo, y tras hacerlo, me fue imposible no plasmar mis impresiones. Aquí.
Es una página sobre flores de Bach. Y si bien he hablado varias veces de diferentes terapiasalternativas... complementarias... magufas como la homeopatía o aquellos que te aseguraban que dejarías de fumar con sus rayos láser (no sin antes desembolsar buenas sumas de dinero), nunca he dedicado ningún post a este tema.
Pero, como siempre, empecemos por el principio.
Es algo que se utiliza en medicina. Un fármaco comercializado bajo el nombre comercial de «Sinus» no es sino una mezcla de aceites esenciales de ciertas plantas, con efecto broncodilatador y mucolítico, que has de diluir en agua caliente antes de usar como inhalador; otro ejemplo de este tipo de usos sería el que conocemos comúnmente con el nombre de «Vicks VapoRub», un ungüento untuoso que ya nos presentan con los aceites esenciales adecuadamente diluidos a la concentración adecuada para poder utilizarlo por vía tópica. ¿Son el mismo tipo de esencias, las que emplean las flores de Bach? ¿A qué concentraciones?
La página de nuestros amigos no nos aporta ningún dato aclarativo al respecto. Pero sí que añaden un párrafo que nos dan qué pensar:
Si revisamos los prospectos de uno de los fitofármacos citados antes, como el «Sinus», nos encontramos con que hay, en primer lugar, una restricción en la edad: Sinus Inhalaciones está contraindicado en niños menores de 12 años. También nos indican que hay una serie de posibles efectos adversos y de riesgo de intoxicación. Es normal. Estamos tratando con principios activos, que si bien tienen un efecto farmacológico primario, siempre son susceptibles de tener efectos secundarios.
Sin embargo, estas «Flores de Bach» no tienen restricciones de edad, efectos secundarios adversos ni contraindicaciones. Eso ya suena bastante sospechoso, y nos deja claro que, en realidad, no se están refiriendo exactamente a esos aceites esenciales. Pero entonces, ¿A qué se refieren con «esencias»?
Otra pista que debería hacernos saltar la alarma de posible engaño es eso de que sirven para tratar estados emocionales y sentimientos. ¿Son acaso algún tipo de antidepresivo apto para todas las edades?
Veamos.
Es decir. En la primera de las metodologías de extracción, lo más que consigues es agua calentada por el sol, con tal vez algún colorante que otro.
En la decocción sí que puedes obtener una mayor cantidad de principios activos, ya que es un método de extracción mucho más rápido y fuerte (así se extrajo por primera vez de la corteza del sauce blanco el ácido salicílico que daría lugar a la conocida aspirina). Sin embargo, una decocción de treinta minutos es, para la mayor parte de los principios activos, demasiado brusca y termina destruyéndolos también. Las decocciones suelen ser de entre cinco y diez minutos, en función de la dureza de la planta y la resistencia del principio activo. Una decocción de una flor de invierno como el almendro destruye la mayoría de los principios activos en menos de dos minutos.
En resumen. El agua que nos queda es, en ambos casos, agua que carece de principios activos, o que si los tiene, estarán muy diluidos.
Otro problema más que presenta esta metodología es que depende mucho de la concentración que la planta tenga en el momento de realizar la extracción. Una parte importante en la síntesis de fitofármacos es la correcta cuantificación de principio activo del extracto, para poder concentrarlo o diluirlo de forma adecuada y así asegurarte que cumple el estándar de concentración; así te cercioras de que en el producto hay, por ejemplo, 15mg de mentol (un alcohol que puedes obtener de la menta, y uno de los ingredientes de aquel «Sinus»), ni un miligramo más ni uno menos.
En este proceso tampoco hay ninguna cuantificación de principio activo, por lo visto. De modo que, tal vez, en la decocción de ayer no extrajiste nada y no lo sabes, y en la de hoy has extraído demasiado y tampoco lo sabes. Ese es un problema de seguridad.
Pero bueno. Eso no importa mucho tampoco, porque cualquiera de estas extracciones luego las van a diluir. Diluyen dos gotas. Es una medida que no llego a encontrar en el Sistema Internacional de Unidades, y en realidad depende del tamaño de la boquilla de la pipeta o cuentagotas que utilices. Pero lo habitual es que en 1ml de líquido haya entre 20 y 25 gotas. Vamos a ser generosos, y que la cantidad a diluir, esas dos gotas, se correspondan con 0,1ml. Eso lo diluyen en nada menos que 30 ml de brandy. No aclaran la concentración de alcohol de dicho brandy, pero deduzco que será de en torno al 40%, que es lo más habitual.
El caso es que el grado de dilución es de 1:300. No es tanto como una dilución homeopática. Eso de favor les concedo.
Nuestros amigos del Centro Bach tienen una solución para esto.
Además, la cantidad de brandy que se consume es ínfima. Nuestra amiga de essències nos dice:
Pero bueno. En realidad... tomando de 4 a 6 gotas, y tomando aquel sistema de cambio de la unidad «gota» a mililitros, te tomas de 0,2 a 0,3 ml de brandy, o lo que es lo mismo, entre 0,7 y 1 µl (que son microlitros, la milésima parte de un mililitro) de aquel preparado de maceración o decocción.
Para que os hagáis una idea, 1µl es la cantidad de líquido que cabe en un cubo de un milímetro de lado.
Me pregunto si cuando hablan de efectividad no estarán confundiendo los supuestos efectos de las flores con los efectos que tiene el brandy per se. Porque hasta donde tenemos datos de momento, todo apunta a que esto es otra de esas cosas que nada tienen que ver con la medicina de verdad. Otra de esas terapias pseudomédicas carentes de fundamento alguno.
Y es que si damos un repaso por la literatura científica, no encontramos ni un solo artículo científico que demuestre eficacia en las flores de Bach. No es más que otra pseudociencia como lo es el reiki, la homeopatía o la técnica milenaria de la acupuntura.
De hecho, no parece que acepten la teoría microbiana de la enfermedad infecciosa; ellos creen que las enfermedades están causadas por la mente, o algo así... Su filosofía la explican más o menos así:
Es preocupante porque una persona sin formación en medicina está realizando consultas a enfermos.
Es preocupante porque esa persona está recomendando remedios de una eficacia que no está demostrada mediante el método científico.
Y es, de nuevo, preocupante porque las consultas las realiza on line.
Claro. Hay una cosa clara, y es que al no ser una profesional de la medicina, no se atiene al código de deontología médica. Porque éste tiene un artículo muy comprometedor, el 26, que dice:
Y me pregunto yo. ¿Cuánto tiene de legal que esta persona realice estas consultas? Recordemos que es una persona sin formación en medicina, que además vulnera de cabo a rabo algo tan básico en medicina como es emplear fármacos de evidencia demostrada, y también permite la consulta on-line que explícitamente prohibe el código de deontología. ¿No debería la ley protegernos de este tipo de farsantes y charlatanes?
Por cierto. Esta señora también imparte cursos de desinformación. Me dan ganas a mi de empezar a impartir cursos para enseñar cosas de verdad, y no este tipo de engaños. De hecho, si alguien puede informarme sobre cómo hacerlo de forma legal, estaría muy agradecido.
Aunque claro, la realidad científica no interesa tanto como aprender a hacer milagros, ¿no?
Viene siendo más o menos, la defensa de todos los magufos de las terapias mal llamadas alternativas.
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El caso es que esta página web, entre muchas otras cosas, tiene una sección de consultas, la cual no pude evitar echar un vistazo, y tras hacerlo, me fue imposible no plasmar mis impresiones. Aquí.
Es una página sobre flores de Bach. Y si bien he hablado varias veces de diferentes terapias
Pero, como siempre, empecemos por el principio.
¿Qué son las Flores de Bach?
Las 38 flores empleadas. |
Las Flores de Bach son una serie de 38 esencias naturales extraídas de flores, cuyas propiedades curativas fueron descubiertas por el médico e investigador inglés Edward Bach (1886-1936). Cada una de ellas sirve para tratar un estado emocional o un sentimiento diferente.Hasta aquí parece que el asunto es bastante similar a unos fitofármacos producidos por extracción de algunas partes de ciertas plantas, que denominamos habitualmente «aceites esenciales». Un aceite esencial es un extracto muy concentrado y cuantificado de los principios activos y coadyuvantes de una planta dada. Aplicar un aceite esencial puede resultar muy peligroso; al estar tan altamente concentrados, si se usan de forma directa sin diluir sobre la piel sana pueden provocar quemaduras químicas y otros efectos indeseados. Es por ello que hay que diluirlos siempre, a diferentes concentraciones según el efecto deseado.
Es algo que se utiliza en medicina. Un fármaco comercializado bajo el nombre comercial de «Sinus» no es sino una mezcla de aceites esenciales de ciertas plantas, con efecto broncodilatador y mucolítico, que has de diluir en agua caliente antes de usar como inhalador; otro ejemplo de este tipo de usos sería el que conocemos comúnmente con el nombre de «Vicks VapoRub», un ungüento untuoso que ya nos presentan con los aceites esenciales adecuadamente diluidos a la concentración adecuada para poder utilizarlo por vía tópica. ¿Son el mismo tipo de esencias, las que emplean las flores de Bach? ¿A qué concentraciones?
La página de nuestros amigos no nos aporta ningún dato aclarativo al respecto. Pero sí que añaden un párrafo que nos dan qué pensar:
Las Flores de Bach pueden ser tomadas sin ningún riesgo por personas de cualquier edad, desde recién nacidos hasta ancianos. Son completamente seguras, no tienen efectos colaterales, no generan adicción, ni interfieren con remedios ni medicinas de ningún tipo.
Un prospecto. |
Sin embargo, estas «Flores de Bach» no tienen restricciones de edad, efectos secundarios adversos ni contraindicaciones. Eso ya suena bastante sospechoso, y nos deja claro que, en realidad, no se están refiriendo exactamente a esos aceites esenciales. Pero entonces, ¿A qué se refieren con «esencias»?
Otra pista que debería hacernos saltar la alarma de posible engaño es eso de que sirven para tratar estados emocionales y sentimientos. ¿Son acaso algún tipo de antidepresivo apto para todas las edades?
¿Cómo se fabrican las Flores de Bach?
La página web no nos indica el proceso de fabricación, así que tendremos que indagar un poco más. En esta otra página web, el Centro Bach, nos explican cómo se elaboran los productos.Veamos.
Traducido a un lenguaje más científico, lo que hacen es:¿Cómo se preparan los remedios?Se utilizan dos métodos para preparar remedios. La mayoría de las flores más delicadas se preparan utilizando el método del sol, en el que las flores se flotan en agua pura durante tres horas, en la luz directa del sol.Plantas más leñosas, y las que florecen cuando el sol es débil, se preparan generalmente por el método de ebullición - es decir, las flores se hierven durante media hora en agua.En ambos casos, una vez que el calor ha transferido la energía de las flores al agua, el agua energizada se mezcla con una cantidad igual de brandy. Esta mezcla es la tintura madre.La tintura madre se diluye en el brandy (en una proporción de dos gotas de tintura madre a 30 ml de brandy) para hacer las botellas se venden en las tiendas.
- Una maceración en frío de tres horas bajo radiación solar para flores de verano
- Una decocción de media hora para partes leñosas y flores de invierno
Una maceración en frío es lo que se utiliza, por ejemplo, para elaborar el llamado alcohol de romero de forma tradicional (aunque el producto farmacológico del vademécum lo que usa es el aceite esencial del romero diluido en etanol). Sólo que para elaborar alcohol de romero debes dejar el romero en maceración fría de una mezcla de etanol-agua al 70% durante más de quince días y en oscuridad (o vidrio de caramelo).
Esto es por dos motivos:
- El proceso de extracción por maceración es tremendamente lento, ya que los principios activos han de difundir de la planta al disolvente. El etanol es relativamente eficiente en el proceso extractivo, pero el agua es más lenta aún.
- La luz solar destruye buena parte de los principios activos de la planta, tanto los fotosensibles como los termosensibles. En la planta estos principios activos están protegidos de la luz por la presencia de clorofilas, pero en el disolvente durarían muy poco tiempo.
Es decir. En la primera de las metodologías de extracción, lo más que consigues es agua calentada por el sol, con tal vez algún colorante que otro.
En la decocción sí que puedes obtener una mayor cantidad de principios activos, ya que es un método de extracción mucho más rápido y fuerte (así se extrajo por primera vez de la corteza del sauce blanco el ácido salicílico que daría lugar a la conocida aspirina). Sin embargo, una decocción de treinta minutos es, para la mayor parte de los principios activos, demasiado brusca y termina destruyéndolos también. Las decocciones suelen ser de entre cinco y diez minutos, en función de la dureza de la planta y la resistencia del principio activo. Una decocción de una flor de invierno como el almendro destruye la mayoría de los principios activos en menos de dos minutos.
En resumen. El agua que nos queda es, en ambos casos, agua que carece de principios activos, o que si los tiene, estarán muy diluidos.
Otro problema más que presenta esta metodología es que depende mucho de la concentración que la planta tenga en el momento de realizar la extracción. Una parte importante en la síntesis de fitofármacos es la correcta cuantificación de principio activo del extracto, para poder concentrarlo o diluirlo de forma adecuada y así asegurarte que cumple el estándar de concentración; así te cercioras de que en el producto hay, por ejemplo, 15mg de mentol (un alcohol que puedes obtener de la menta, y uno de los ingredientes de aquel «Sinus»), ni un miligramo más ni uno menos.
En este proceso tampoco hay ninguna cuantificación de principio activo, por lo visto. De modo que, tal vez, en la decocción de ayer no extrajiste nada y no lo sabes, y en la de hoy has extraído demasiado y tampoco lo sabes. Ese es un problema de seguridad.
Brandy, el componente mayoritario con un 99,997% de concentración de las Flores de Bach. El extracto floral es el 0,003% restante. |
El caso es que el grado de dilución es de 1:300. No es tanto como una dilución homeopática. Eso de favor les concedo.
¿Sin efectos adversos, incluso para bebés y embarazadas?
El caso es que, por lo visto, son estas botellitas de brandy las que venden en las tiendas, y esas que « pueden ser tomadas sin ningún riesgo por personas de cualquier edad, desde recién nacidos hasta ancianos». Para mi que algo falla aquí. ¿Realmente puedes administrar un licor de 40 grados a un recién nacido o una embarazada?Nuestros amigos del Centro Bach tienen una solución para esto.
Las flores están conservadas en alcohol, por lo que le recomendamos que, si está embarazada, las diluya (con lo cual casi no queda huella del alcohol).Y problema resuelto. Diluyes la dosis aún más, y ya está. Tranquila, que los principios activos que quedan (recuerden, 0,1ml por botella de 30ml) no van a perder aun más su efectividad aunque los diluyas. El alcohol etílico sí, pero el mentol no. Claro.
Además, la cantidad de brandy que se consume es ínfima. Nuestra amiga de essències nos dice:
Se toma de 4 a 6 gotas directamente en la boca, mínimo 4 veces al día, si la persona siente la necesidad de tomar más veces se puede aumentar la cantidad de tomas al día sin ningún riesgo, incluso en momentos de crisis se puede tomar cada 5 minutos.Claro que sí. Como si te tomas el chupito, recordemos, de 30ml, de una sentada. A no ser que seas intolerante a la ingesta de etanol, lo máximo que te puede pasar es que, y disculpen la expresión, te pilles un pedo.
Pero bueno. En realidad... tomando de 4 a 6 gotas, y tomando aquel sistema de cambio de la unidad «gota» a mililitros, te tomas de 0,2 a 0,3 ml de brandy, o lo que es lo mismo, entre 0,7 y 1 µl (que son microlitros, la milésima parte de un mililitro) de aquel preparado de maceración o decocción.
Para que os hagáis una idea, 1µl es la cantidad de líquido que cabe en un cubo de un milímetro de lado.
Me pregunto si cuando hablan de efectividad no estarán confundiendo los supuestos efectos de las flores con los efectos que tiene el brandy per se. Porque hasta donde tenemos datos de momento, todo apunta a que esto es otra de esas cosas que nada tienen que ver con la medicina de verdad. Otra de esas terapias pseudomédicas carentes de fundamento alguno.
Y es que si damos un repaso por la literatura científica, no encontramos ni un solo artículo científico que demuestre eficacia en las flores de Bach. No es más que otra pseudociencia como lo es el reiki, la homeopatía o la técnica milenaria de la acupuntura.
De hecho, no parece que acepten la teoría microbiana de la enfermedad infecciosa; ellos creen que las enfermedades están causadas por la mente, o algo así... Su filosofía la explican más o menos así:
nuestra salud física depende de nuestra manera de pensar, de nuestros sentimientos y emociones. La salud es armonía, ritmo; existe cuando pensamos en forma positiva, constructiva, feliz. La enfermedad física no es de origen física (sic.), es la consolidación de una actitud mental.Vamos. Que toda la medicina moderna está equivocada.
Un problema deontológico
Eso nos queda, además, completamente claro cuando vemos el Curriculum Vitae de la «terapeuta». Yo albergaba una leve esperanza de que fuese licenciada en medicina, veterinaria, o al menos alguna carrera con cierta relación con la salud, como la biología, la enfermería o similares. Pues no. Toda la formación que tiene es esta:Ese soy yo. Y esto está expedido por Boiron. |
Soy terapeuta FLORAL© en flores de BachY yo tengo un certificado expedido por Boiron. ¿Puedo poner una consulta de homeopatía? ... Bueno, pues el caso es que esta persona no cualificada está realizando consultas. Y eso es muy preocupante.
Es preocupante porque una persona sin formación en medicina está realizando consultas a enfermos.
Es preocupante porque esa persona está recomendando remedios de una eficacia que no está demostrada mediante el método científico.
Y es, de nuevo, preocupante porque las consultas las realiza on line.
Claro. Hay una cosa clara, y es que al no ser una profesional de la medicina, no se atiene al código de deontología médica. Porque éste tiene un artículo muy comprometedor, el 26, que dice:
Pero vamos. Como digo, este es el código de deontología para los médicos, no para los terapeutas florales. Habría que ver cuál es el código de deontología de los terapeutas florales, ¿no?Artículo 261.‐ El médico debe emplear preferentemente procedimientos y prescribir fármacos cuya eficacia se haya demostrado científicamente.2.‐ No son éticas las prácticas inspiradas en el charlatanismo, las carentes de base científica y que prometen a los enfermos la curación, los procedimientos ilusorios o insuficientemente probados que se proponen como eficaces, la simulación de tratamientos médicos o intervenciones quirúrgicas y el uso de productos de composición no conocida.3.‐ El ejercicio clínico de la medicina mediante consultas exclusivamente por carta, teléfono, radio, prensa o internet, es contrario a las normas deontológicas. La actuación correcta implica ineludiblemente el contacto personal y directo entre el médico y el paciente.
Y me pregunto yo. ¿Cuánto tiene de legal que esta persona realice estas consultas? Recordemos que es una persona sin formación en medicina, que además vulnera de cabo a rabo algo tan básico en medicina como es emplear fármacos de evidencia demostrada, y también permite la consulta on-line que explícitamente prohibe el código de deontología. ¿No debería la ley protegernos de este tipo de farsantes y charlatanes?
Por cierto. Esta señora también imparte cursos de desinformación. Me dan ganas a mi de empezar a impartir cursos para enseñar cosas de verdad, y no este tipo de engaños. De hecho, si alguien puede informarme sobre cómo hacerlo de forma legal, estaría muy agradecido.
Aunque claro, la realidad científica no interesa tanto como aprender a hacer milagros, ¿no?
Todo es cuestión de fe en el Regalo que Dios nos ha dado.
Para finalizar no puedo evitar añadir un comentario a esta frase que citan:Está claro que el doctor Bach no tenía mucha idea de biología. Esa frase: «todo en la naturaleza es simple» es un insulto directo a todas las ciencias naturales. Lo que esa cita quiere decirnos es: no te fíes de la ciencia; basta con que tengas fe en estos remedios, y serán útiles.No es necesaria ninguna ciencia, ningún conocimiento, a excepción de los simples métodos que se describen. Y los que obtendrán los mayores beneficios de este Regalo Enviado por Dios serán aquellos que lo mantengan tan puro como es; libre de la ciencia, libre de teorías; porque todo en la Naturaleza es simple.Doctor Edward Bach. El 30 de Octubre de 1936.
Viene siendo más o menos, la defensa de todos los magufos de las terapias mal llamadas alternativas.